Cosas de conducir

Voy a comentar algunas cosas del arte de la conducción. En realidad no voy a hablar de conducir, que es algo bastante fácil, sino de CIRCULAR, esa gran asignatura pendiente de tantos.

Voy a enumerar algunas cosas que me suceden cuando circulo por ciudad o carretera que son a veces para perder los nervios, aunque ya sabeis... EL QUE SE CRISPA PIERDE.

• Estás un periodo de tiempo interminable buscando un hueco para aparcar en la calle, y ves de lejos algo que parece ser uno. Cuando te acercas... ni de coña, un amable conductor ha estacionado su vehículo ocupando dos plazas: Genial.
• Vas en autovía/autopista y el coche que va delante circula a una velocidad muy por debajo de la de la vía, cuando decides adelantarlo. En ese instante, parece que despierta de su letargo, o se pica o yo que se que, pero acelera. Pues nada, vuelves al carril derecho y sigues la marcha tras él. Pasan un par de minutos y... sopresa, otra vez a paso tortuga. Este bucle puede durar trayectos completos, hasta que te hartas y lo adelantas a 150 Km/h.
• Vas por ciudad (50 km/h de máximo) a una velocidad moderada, incluso sobrepasando un par de Km la máxima, por el carril izquierdo. Te aparece detrás el típico cagaprisas que se cree que está en la autovía y te presiona para que aceleres o te cambies de carril: claxon, ráfagas... Señor mío, voy en el carril que me apetece y ni siquiera por debajo del límite, váyase usted a la porra!.
• Esta vez vas por carretera convencional: un carril para cada sentido. Te toca detrás de un lento camión, habrá que buscar un momento idóneo para adelantar. Cuando la línea es discontinua asomas el morrito y venga a venir coches de frente, imposible. Parece que ese que viene es el último, el momento está cerca y... cuando pasa, otra vez línea continua: una gran curva sin visibilidad. A esperar. Curioso que durante la línea continua no pase ni un puñetero coche en contra, y cuando vuelve la discontínua, otrooo convoy del ejército! (exageración... o no). He llegado a recorrer 50 kilómetros en estas circunstancias (hasta que el camión se desvió de mi ruta). Frustrante.
• Otra en ciudad. Mucha gente no tiene que tener mucha idea de cómo gira un coche, porque cuando giran para meterse en una calle se abren cómo si estuvieran aparcando en batería, y claro, en calles con carriles estrechos invaden el otro carril. Nada, a esperar a que el niño gire.
• Algo que pasa muy frecuentemente también es que te toque la tortuguita delante, y no es eso, porque comprendo que puede ir buscando aparcamiento o no conocerse la ciudad. La cosa viene cuando después de seguirle un rato a 30 Km/h vas a pasar un semáforo en ambar y entonces le salen alas de repente y acelera, dejándote a tí el semáforo en rojo. Por otro lado mejor porque te lo quitas de encima, pero es algo que me pasa a diario y ya cansa.
  
• Cuando eres tú el que va delante y el semáforo se pone en ambar, a veces si que tendrías tiempo para detenerte, pero te haces un poco el despistado y lo pasas casi casi (y sin el casi a veces) en rojo. Pues yo hay ocasiones en las que dudo si pasarlo así o no, con un semisentimiento de cuasiculpa... que se me quita enseguida cuando acto seguido a eso, por el espejo retrovisor observo como el coche que va detrás, y a veces alguno más, aprovechan mi disimulo y me siguen con total tranquilidad. Yo pasándolo mal con estos sinvergüenzas sueltos...
  
• Otra sensación rara es cuando en una calle larga, pongamos que tienes que girar al final de la misma hacia la derecha, y forzosamente tienes que situarte en éste carril. Pues si el trafico se desvía en gran parte por ese lugar, pasa que el carril derecho está bastante libre, y es un dulce caramelo ponerte ahi para adelantar puestos. Qué ocurre? pues que te tendrás que cambiar de carril tarde o temprano, y el "subidón" viene cuando apuras al máximo con el consiguiente riesgo de no poder (porque no te dejen, y con razón) meterte a tiempo. Te creces más y más sintiendo el poder de ir adelantando a todo el mundo, que gozada.
• Algo más común es cuando en carretera pillas un atasco tremendo en la entrada/salida de una ciudad y en el otro sentido el trafico es más que fluído. Cómo jode verlos ahí pasar y pasar avanzando pocos metros al minuto. Pero... y la otra cara de la moneda? Cuando ves un atasco en el otro sentido... te sientes genial; de la que te has librado, pobres diablos!.
  
• Por último quiero matizar una cosilla que me choca bastante.
  La diferencia entre Badén y Resalto.

Badén

Resalto

Esto es así de claro, y se puede confundir uno, dos o cien, pero los señores que ponen las señales lo deberían tener más claro que cualquiera no?

Mi profesor de autoescuela me lo enseñó cómo que el resalto tenía la forma que se hace al saltar; más o menos lo que hacía Joaquin Prat en su mítico "Aaaaa jugaaar" en el precio justo. En definitiva: Salto = Resalto (regla nemotécnica buenona).

Que la gente llame badén al resalto es una realidad, y no me molesta en exceso, aunque sea algo erróneo extendido cómo tantas cosas (se terminará aceptando pues así hacemos las cosas en éste país). Lo que me llama bastante la atención es ver cosas así:


Bien, la señal parece contradictoria, pero podría estar anunciando un resalto y además un paso de peatones sobre un badén, esto es: hundido, no abultado.

Qué nos encontramos 50 metros más allá de esta señal?


Un paso de peatones sobre UN RESALTO!!

Nada más que decir, señoría.