viernes, 19 de junio de 2009

Mis elementos preferidos

Hay palabras que molan: Chichas, Jambo, Churros, Sosainas... por qué no reconocerlo.

Pues hay quien no se moja, pero yo si, soy un valiente del palabro; y hoy voy a citar cuales son mis elementos preferidos de la tabla periódica. Su belleza radica en imaginarlos como un completo abanico de ancianitos habitantes de un asilo.

Cesio y Francio son simpáticos y majetes.
Berilio y Estroncio son inseparables jugadores de petanca.
Rutherferdio podría ser el abuelete de erasmus que se lleva a las ancianas del lugar al huerto (y allí se las beneficia).
Tántalo y Seaborgio son vejetes de época, de los que salen en las novelas. Elegantes, planta y carisma, perfil y millones bajo el colchón.
Manganeso es el cleptómano del grupo. Su apodo viene de "Te manga eso".
Tecnecio es el más adaptado a las nuevas tecnologías, tiene un Ipod con canciones de Prodigy a modo de marcapasos.
Osmio, Paladio y Cadmio son los gamberros que roban el puré a los nuevos, su solo nombre causa pavor.
Antimonio es el satánico de la resi, cuidao con él, da mal rollo.
Bismuto y Astato, los míticos tahures.
Teluro el sastre que mejor arregla los bajos de las batas.
Argón y Radón superabuelos cuando el edificio duerme. Se vengarán de Osmio y Cía.

La verdad es que uno de mis proyectos era una serie de historietas ocurridas en una residencia de ancianos y después de soltar esta cantidad de chorrisandías me estoy planteando dar forma a... "LOS SENILES". Quizá algún día.

2 comentarios:

  1. Jaja!! Buenísimo!! una duda, porqué argón y radón suenan a superhéroes?? por acabar en "on"? pero no me cuadra porque tenemos héroes anglosajones, que acaban en man... curioso, curioso...

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  2. pues yo te dire una cosa que me paso en el primer examen de quimica inorganica de la carrera.
    primer examen de la temporada, una facultad que no era la de farmacia porque estaban todas las aulas ocupadas, llego con el tiempo justo y me da la sensacion de que me he equivocado de aula de examen porque alli la edad de las personas superaba, y con mucho, los 18 años que teniamos los novatos. al final veo a una de mis compañeras de clase: el fatidico examen debe ser aqui. entramos al aula, nos sentamos y comienza el examen con el tipico miedo y los nervios.
    se hace lo que se puede, pero llego a uno de los problemas y me surge una gran duda: cual era la valencia del Pd? debe ser una errata, a mi me suena mas que esa valencia era +2 pero para salir de dudas levanto la mano y pregunto al buen señor Benigno: la valencia del PODONIO no es +2? con estos valores que pone en el examen no me cuadran los orbitales...
    el señor me mira, mira el examen y me contesta que deberia fijarme mas en la pregunta del examen.
    hago lo que me dice y acabo solucionando mi gran problema.
    cuando salgo del examen ya me encaja mas la contestacion que me dio benigno y la cara que puso cuando le hice la pregunta: le habia preguntado por un supuesto elemento quimico apodado PODONIO cuando en realidad esa cosa se llama PALADIO.
    en septiembre volvimos a vernos las caras....

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